Sofía Tarrazo ama el café. Habla de este producto con pasión, con una sonrisa en la boca que acompaña su enorme sabiduría respecto a un mundo en el que República Dominicana tiene mucho de lo que presumir en términos de calidad.
Sofía unió recuerdos de infancia, pasión, vocación social y esfuerzo en un emprendimiento muy especial. Su proyecto, Poesía Colada, va mucho más allá de una marca de café y que puede adquirirse en Supermercados Nacional.
«Me gradué como ingeniera industrial y trabajé un tiempo de mercadeo», relata. «Llegó un momento en mi vida que decidí que todo mi esfuerzo debía ponerlo en algo que me apasionara. Y, literalmente, cerraba los ojos y lo único que pensaba que podía hacer mi día entero con pasión era café».
Pese a no venir de una familia con tradición cafetalera, la bebida estuvo muy presente en su infancia. «El café era un momento muy especial, sobre todo con mi abuela. Lo amaba».
La decisión dio paso a un plan que incluyó un máster en Emprendimiento, un estudio a fondo sobre café en Francia y una experiencia como barista en Italia. Fue allí donde conoció el tostado y su idea inicial de abrir un coffee shop cambió.

«El tostado viene siendo como el chef del café; es quien le da su toque especial a cada uno, su insignia», describe. «Mezcla una parte importante de ingeniería industrial, que es la parte de procesos, de trabajo, y mi pasión por el café. Ahí hice un pequeño giro al negocio».
Desde su experiencia, su pasión y su conocimiento, nos da las claves de lo que es un buen café. En el caos del café de especialidad, lo primero es que debe sentirse como un café especial, debe darte distintos tipos de notas”.
Además, Sofía añade seis conceptos básicos para identificar un café de calidad:
1. Cuerpo. Cuanto más denso sea, mejor.
2. Sabores. Igualmente, cuantos más sabores te dé una misma taza, mejor.
3. No debe ser amargo.
4. Acidez. Debe tenerla, porque dentro de la acidez estarán los saberos.
5. Dulzura. Debe ser dulce.
6. Retrogusto. Debe ser largo, cuanto más largo, mejor, siempre que sea de calidad.

Son los factores principales que definen un buen café y que están presentes en el producto 100 % dominicano. Por eso, Poesía Colada apuesta por convertir la rutina de tomar café cada mañana en una experiencia.
“Nuestra idea es empezar a hablarlo, entregarlo”, relata. “Que la gente vea que dentro de nuestro mismo país hay un sinfín de sabores dependiendo de dónde venga el café y qué proceso se le aplique”.
Por ejemplo, “tú puedes probar 10 cafés de Ocoa, y pueden saber totalmente diferentes. Al igual que ocurre con el vino, con la cerveza artesanal, co el aceite de oliva, qué chévere saber que en nuestro país podemos tener tantos sabores diferenciales y tanta calidad”.
Una calidad que Sofía y su equipo transforman en tazas de poesía.